Te quejas de que contigo soy una antipática, de que soy una rencorosa, de que a cualquier chico lo trato mucho mejor que a ti. Te quejas incluso de que te llamo idiota, que no tienes remedio... Muchas veces incluso te quejas porque te reprocho a ti cosas que a los demás chicos no les reprocho... Y ahora vas a saber la verdad. Soy antipática contigo porque necesito tenerte cerca cada segundo y aunque estés a mi lado para mí aún estás demasiado lejos. Soy rencorosa porque me importas muchísimo. Por regla general todo lo que me puedan decir me da igual, pero tú eres la excepción. Te diré también que detrás de cada mirada se esconde un te quiero. Que detrás de cada media sonrisa se esconden una ganas increíbles de besarte. Te diré que me encanta que me abraces por la espalda. Enloquezco cuando te quedas mirándome fijamente mientras río. Y sí. Esto es lo que se esconde detrás de cada insulto. Porque no sé cómo, ni cuándo, ni por qué pero te quiero.
Si tú no estás es como ver una película en blanco y negro: me pierdo los matices, los detalles... Me pierdo. En menos de un año a tu lado he aprendido cosas importantes como que el negro no es la ausencia de color sino la mezcla de todos ellos, que si tengo un mal día tan sólo tengo que dar razones para sonreír...
No hay comentarios:
Publicar un comentario